Ya lo decían en la previa. Era un partido en total desventaja. Almirante Brown jugaba con once futbolistas que no se conocían y sin tiempo para prepararse. Por ejemplo, Gastón Rossi conoce a sus compañeros hace dos días y ya tuvo que saltar a la cancha ante un San Lorenzo con rodaje. Así y todo, el equipo dirigido por Felipe de la Riva hizo un trabajo aceptable.
El primer tiempo lo controló hasta el primer gol de San Lorenzo. Luego, el cansancio físico y el segundo gol cuervo sentenció el encuentro y el pase del Ciclón a una nueva fase de la Copa Argentina.
El deficit de Almirante Brown fue en la delantera. Claro, sin las habilitaciones de los tres delanteros incorporados, De la Riva tuvo que improvisar con un solo delantero (Hernán Salazar) para buscar el partido. Difícil así generar chances. Esta imposibilidad hizo extrañar a tres jugadores como Spada, Herrera y Meza a los que ni siquiera vimos jugar. Increible.
El resto del equipo no hizo un mal trabajo controlando al rival. Cabe destacar el buen partido de Hernán Veloso y el primer tiempo de Alexis Canelo. Luego, una correcta actuación de los centrales y no más. Otro que ingresó bien fue Lucas Ferreiro que, en sus pocos minutos, mostró buenas intenciones.
El verdadero objetivo comienza en agosto. El verdadero objetivo es Dálmine. Ya con Román Díaz, Herrera, Meza, Ibars, Meza Sanchez. A preparse, más que nunca. Operativo retorno.
Fotos: Marcelo Lacerda
1 comentario:
Bien el arquero un rebote al medio del área y el segundo gol manos de manteca...ha no cierto tiene basta experiencia...haaa cierto en "b metro" OK...los refuerzo jugaron algunas vez al fútbol profesional ??
Publicar un comentario