Almirante aprovechó cada error de Desamparados y goleó en Casanova como hace rato no hacía. En un partido donde pareció que hubo un sólo equipo, el Mirasol se quedó con otros tres puntos en el Fragata y se acerca a los puestos de arriba de este torneo de la B Nacional. 
Ni nos acomodamos en el Fragata Sarmiento y Almirante ya ganaba porque al minuto de juego, en una jugada extraña, Chavarri quedó mano a mano con el arquero y se la picó con la parte externa del pie. Pero no iba a quedar así, los errores de Desamparados siguieron. Si no fijense el segundo gol de Brown: centro de Chavarri (que vuelve loco a cualquier defensa todos los primeros tiempo) y gol de Vega entre medios de los dos centrales. Muy extraño el primer tiempo (y casi todo el partido), no sabemos si Almirante jugó muy bien o Desamparados juego muy pero muy mal. Nos parece que un poco de cada cosa, la delantera de Almirante dominó el todo momento a la defensa sanjuanino y Olmedo se comió el mediocampo. Con estas dos cosas se puede sintetizar todo.
El segundo tiempo no fue tan distinto, Almirante aprovechó cada error del rival. Pero como dijimos antes es dificil analizar el partido, si hubo uno sólo en la cancha. Lo que seguimos resaltando es la cantidad de chicos de las inferiores, en un momento la columna vertebral (2, 5 y 9) eran de la cantera: Hernán Ortiz, Gastón Giménez y Cristian Gutierrez. ¿Los goles? Vinieron de rebotes: en el tercero saca el defensor, pega en la espalda de Cisterna y se le mete por arriba al arquero puyutano. En el cuarto, le pega el Pipi de afuera del área, pega en un jugador del Verde y descoloca a Aguiar que poco pudo hacer. Después el partido estuvo de más. Si lo terminaba antes nadie se iba a quejar.
Así, el Mirasol se acerca a la cima de la tabla. De a poco, pero se acerca. Ahora se viene Defensa, pero en un tiempo largo ya que hay parate por las elecciones presidenciales. O sea, tenemos un tiempo largo de felicidad
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