Se cansaron de repetir que, en el receso, tenían que venir soluciones para las diversas fallas del equipo. Lo mencionaron los propios jugadores, los entrenadores y parte de los dirigentes. ¿Biglia es solución? Llegó como refuerzo y jugó de titular con apenas una práctica junto a sus compañeros. Fue, por escándalo, lo más flojo del equipo y se lo notó desorientado en la mitad de la cancha, junto a un Meza Sánchez incómodo por la derecha. Almirante no encontró la brújula tampoco en ataque, con Román Díaz en un mal partido y un Victor Meza que fue más de lo mismo. ¿Rodriguez será el salvador? Nos permitimos dudar.
Sobre el final de la primera etapa llegó el primer tanto de Costa para darle justicia al marcador. El Mirasol no tuvo ni siquiera una clara en la primera parte como para poder llegar al gol, o generarle peligro al arco del Lechero.
Lo peor vino en la segunda etapa. Costa y Diz marcaron en los primeros minutos y a los siete minutos Almirante caía por tres goles. Meza descontó, con el arco vacío, pero nuevamente Diz, que falló un penal y el lateral derecho Molina decoraron el 5-1 final.
Volvemos al inicio de estas líneas. Palabras tal vez haya muchas: bochorno, desastre, hasta incluso pueda caberle la palabra vergüenza a lo que mostró Almirante Brown esta tarde. Sin embargo habrá que dar vuelta la página rápido porque el martes viene el que puede ser, quizás, el partido del año. Se viene una nueva edición del clásico del Oeste, frente a Morón, en Isidro Casanova.
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